MAEx que inspiran: Lea Sulmont

Los logros profesionales se hacen con mucho esfuerzo y dedicación. Pero siempre hay sucesos que los detienen y te cambian los planes. Ser madre y estudiar a la vez, no es fácil, pero con motivación todo se puede lograr. Un gran ejemplo de ello es Lea Sulmont, actual Vicerrectora Académica de la Universidad Privada Peruano Alemana – UPAL, quien desde muy joven empezó a desarrollarse profesionalmente como docente.

Apasionada por formar docentes y diseñar proyectos. Le encanta viajar, bailar danza moderna y profesional. Su decisión por elegir la educación surgió desde su adolescencia, y sus primeras experiencias fueron como docente de historia y geografía de secundaria, además de danza para niños.

Debido a un problema de salud, tuvo que alejarse de las aulas. Pero motivada en seguir estudiando, realizó una maestría y doctorado en Francia. Cuando regresó al Perú, tuvo la gran oportunidad de empezar un proyecto de Educación a Distancia en la Pontificia Universidad Católica del Perú – PUCP.

A sus 30 años, consiguió un trabajo en el área de tecnología educativa, ello marcó un hito importante al enfocar proyectos ejecutivos en su vida. Tras ello, en el 2011, participó en la creación de la Facultad de Educación de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas – UPC. Luego de ello inició un proyecto en el Instituto Privado Peruano Alemán – IPAL, donde luego de tres años, lo concluyó.

Inspirémonos con su historia, a continuación:

  1. ¿Cuéntanos de ti?

Soy Lea Sulmont, educadora, tengo un hijo de 18 años y actualmente soy Vicerrectora Académica de la Universidad Privada Peruano Alemana – UPAL. Además de ello, hago muchas cosas en paralelo relacionadas a la educación.

2. ¿Cuál es tu pasión?

Me encanta enseñar, me apasiona formar a docentes que van a formar ciudadanos en diversos niveles educativos. Me gusta mucho diseñar proyectos y realizarlos, lanzarlos y dejarlos ser. Cada cierto tiempo armo proyectos educativos, los lanzo y me gusta seguir su ejecución, ya sea en los formal e informal, o en lo público y privado.

3. ¿Qué es lo que más te gusta hacer?

Me encanta viajar, mi primera especialidad fue como profesora de historia de geografía, fue a lo que me dediqué en los primeros años de mi vida profesional. También me gusta mucho bailar, esto me llevó a hacer danza moderna y danza profesional por mucho tiempo.

4. ¿Qué te hizo tomar la decisión de elegir la educación?

La decisión de lo que quería hacer profesionalmente surgió muy tempranamente, el tema de la educación, de enseñar, de crear cosas relacionadas al arte, la cultura, estuvo en mi adolescencia. Cuando tuve la decisión u oportunidad de entrar a la universidad, yo no sé si quería estudiar administración para crear o ser educadora para diseñar modelos educativos. Finalmente me decidí por la educación.

Mis primeras experiencias de formación fueron en colegios de secundaria, a la par trabajaba como maestra de geografía en secundaria. También he sido profesora de danza para niños, danza creativa y circo. Incluso tuve una empresa de animaciones infantiles con una vista muy cultural, muy ligada al teatro, con malabares, con historias y me he dedicado a eso hasta que tuve un problema de salud. Perdí un oído, tuve tres operaciones y eso hizo que me alejara de las aulas. Fue bastante complicado.

Tras ello decidí seguir estudiando, hice una maestría sobre dispositivos de formación abierta y a distancia, y con ello fui acercándome al mundo de las tecnologías, sobre todo al diseño de materiales ligados a las imágenes y al multimedia, que en ese entonces era una industria efervescente.

Después de hacer esa maestría, en Francia, regresé a Perú y empecé un proyecto en la Pontificia Universidad Católica del Perú – PUCP. Allí inicié mi especialidad en el tema de Educación a Distancia, como responsable de la creación de materiales y plataformas, donde nos fue maravilloso, desarrollamos un montón de procesos de formación a distancia a lo largo de todo el Perú y Latinoamérica. Ello me motivó a continuar con mi tesis de doctorado sobre ese proyecto.

Para poder hacer esta tesis, tuve que terminar mi relación laboral con la PUCP, porque en Francia lo que me pedían era que tenga una aproximación de campo, pero también una distancia. Cuando tomé esa decisión mi hijo acababa de nacer, me encontré como madre soltera, fue muy difícil pero fue mi motivación para continuar. Conseguí una beca para viajar y terminar el doctorado, mi hijo me acompañaba, con un año y cuatro meses, a la universidad, cambiándolo, lo dejaba en la guardería, vivía con él en un cuarto de estudiante, fue una época bien difícil, pero la más motivadora y yo pienso ahora: ¿Volvería a hacer mi doctorado, la tesis en esas condiciones? Fue una de las etapas más retadoras y a la vez motivadoras. Luego pude regresar a Perú, terminar de escribir la tesis y sustentarla. Mi hijo me acompañaba en todo momento, y recuerdo que me decía: “mamá voy ayudarte a hacer tu tesis”.

El día de cumplí 30 años conseguí un trabajo en el área de tecnología educativa, fue allí donde empecé a crear diversos proyectos, a formar a docentes e integrar tecnologías en diferentes campos, entre la docencia y la academia. Eso marcó un hito importante en mi vida, porque el término “ejecutiva” empezó a entrar a mi vida, hasta entonces, me concebía como educadora, hacía proyectos pero en esta universidad, el perfil más corporativo empezó a entrar a mi vida.

Me dediqué a diseñar muchos proyectos maravillosos de educación a distancia, educación online para ejecutivos y mi hijo me fue acompañando en todas estas aventuras. A la par iba yo también iba con él en su escolaridad, fue una alimentación mutua, creo que ser madre es un incentivo muy bonito para poder focalizar tus sueños y también alimentan los sueños de tus hijos.

Un reto muy lindo en mi carrera profesional fue que en el 2011 me proponen crear la Facultad de Educación en la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas – UPC. Yo venía dedicándome a la tecnología, a la formación de docentes. Me decían, “necesitamos hacer una nueva Facultad de Educación y tú eres la única en la universidad que eres educadora y además doctora”. Recibí ello como el mayor regalo, creé la facultad donde enseño hasta ahora, pero llegó el momento donde sentía que necesitaba trascender de otra manera, salir de esa burbuja, digamos en ese ámbito de la universidad privada, en un contexto bastante privilegiado, además era un momento de mi vida donde hice una transición, decidí mudarme y empezar todo de cero.

Inicié un proyecto en el Instituto Privado Peruano Alemán – IPAL (es donde también conozco de la UPAL) que era un instituto donde tenía que transformar todo, rehacer muchos procesos en el ámbito de la educación técnica. Tomó 3 años hacer toda la transformación pero fue una de las experiencias más enriquecedoras. Pude enseñar más de 25 carreras y transformamos toda la organización. Una vez terminado el proyecto, terminó esta etapa ejecutiva y decidí no hacer nada, parar y entender todo lo que he aprendido. Había transitado por la educación superior, la tecnología, la educación básica y la educación técnica.

En este tiempo me proponen ser Consejera del Consejo Nacional de Educación. Considero que las cosas llegan cuando tienen que llegar. Esto me permitió conectar a otro nivel con la educación, tener otro tipo de compromiso. Empecé a trabajar de manera independiente y en estos últimos años he transitado así: entre la docencia, apoyar proyectos educativos y en todo el proceso de educación. Es una experiencia fantástica.

“Soy más soñadora y emprendedora de proyectos”.

En mi vida he tenido varios accidentes, una de ellas es que perdí el oído a los 22 años, yo escucho en mono y no en stereo. Otro accidente grave que tuve fue en un viaje de trabajo cuando estuve en México, hace más de 10 años, me atropellaron, me arrastraron contra el pavimento y me quemé casi todo el cuerpo. Estuve cerca de 10 días, antes de volver a Perú, envuelta con cicatrices en las piernas y sin poder caminar. En ese momento me pregunté, ¿qué hago?, ya me habían otorgado el cambio a Perú para trabajar en la Facultad de Educación de la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas – UPC, pero quedé con secuelas muy fuertes.

Pasaron 6 meses del accidente y llamé a mi jefe (de aquel entonces) para aceptar la propuesta de trabajar en la Facultad de Educación de la UPC; sin embargo, antes de asumir el cargo le pedí un poco de tiempo para prepararme más para ese nuevo reto. Por ello, decidí llevar un Máster de Administración y Gestión y adquirir nuevos conocimientos sobre números y rentabilidad, que eran fundamentales para sustentar desde diferentes ámbitos los proyectos educativos.

5. ¿Cuáles fueron las decisiones más complicadas de tu carrera?

Una de ellas fue el reto de despedir a personas, cuando estuve en IPAL se presentaron algunos problemas que conllevaron a realizar modificaciones y hacer una contracción terrible. Yo no estaba de acuerdo con las decisiones del Directorio y el Comité. Mis decisiones sobre temas estratégicos tuvieron que ver cuando se atenta a la dignidad de la persona. Esas son las cosas que más me han costado.

6. ¿Cuál fue la mejor decisión de tu carrera?

Detenerme, tomarme un semestre sabático y parar por completo. Me permitió volver a tener curiosidad por muchas cosas, conectar y poder ayudar de otra manera. Tomarme un ‘break’, parar y tomar la decisión de ya no tener sueldo fijo. Yo siempre he sido muy ahorradora, soy simple, no tengo ninguna deuda, no tengo tarjetas demás.

Cuando tomé esa decisión, tuve mis previsiones, pero la angustia de pasar de la planificación y seguridad a vivir el día a día de otra manera fue complejo al inicio, pero lo pude lograr. Cuando se hacen las cosas bien, las cosas llegan solas. Con ello también dejé muchas cosas, como vestirme de una manera que no me gustaba, comprarme blusas que tampoco me gustaban, entre otras cosas. Esto me permitió decir: “esta soy yo y aquí estoy, no tengo que jugar otro rol y en qué puedo servir”.

Parar me ayudó a conectar muchas cosas, a encontrar más propósitos y a que lleguen oportunidades donde yo podía cumplir el propósito y los sueños de otras personas.

7. Desde tu posición, ahora en la UPAL, tienes a muchas colaboradoras, ¿Cómo crees que puedes apoyar a las mujeres de tu organización o a las mujeres de estas nuevas generaciones que van a empezar a estudiar en esta nueva universidad?

Estoy muy contenta de poder lanzar el proyecto, es un sueño que viene cocinándose hace muchos años, de generar nuevas propuestas de formación donde chicos y chicas jóvenes puedan encontrarse como iguales y poder desarrollarse como iguales. Tener estas oportunidades y debatir sobre estos temas de equidad, de complementariedad; no de oposición, todo lo contrario. Debemos formar una generación que deje de oponerse, que tú eres hombre, que tú eres mujer, todos somos iguales pero somos diferentes, esa es la riqueza.

Tanto los colegas como yo, tenemos la oportunidad de contribuir a generar una nueva cultura, que no se promueve en las universidades, desde el lenguaje que se utilizan, cómo fomentar a que hombres y mujeres se sientan identificados con su opción profesional, su opción de género, su identidad, y ser ciudadanos y ciudadanas conscientes y responsables.

Que generen una nueva ética, desde esta complementariedad, dejar de oponerse, esto me entusiasma mucho, es tremendo reto. Formar una nueva generación de inquietos, pero no solo inquietos, sino inquietos que tengan valores, que tengan principios, que tengan sueños, que tengan herramientas para hacer sus sueños realidad. Es una de las cosas que más me motiva, veo que las mujeres de la organización, que algunas voy conociendo y a otras ya las conocía, tienen este espíritu, y tenemos que generar dentro de todo el espíritu de colaboradores estas situaciones de equidad, sin oponernos.

8. Regresando a la maternidad, ¿Crees que desarrollaste alguna habilidad en ella que luego la pasaste a tu vida laboral o a tu trabajo?

Soy una persona que siempre ha trabajado muy cercanamente con niños y niñas, siempre me ha gustado, cuando tuve mi hijo era muy feliz fabricando todo, cosiendo todo, me gustaba mucho elaborar cosas pensando siempre en la persona, ello pude trasladarlo después a otros campos. Cómo elaboras pensando en el sujeto, cómo creas pensando en la persona, de acuerdo a lo que necesita. La maternidad me despertó mucha creatividad y responsabilidad, yo me he divertido mucho siendo mamá con mi hijo pequeño, a pesar del cansancio, para mí era muy divertido jugar, re explorar el juego.

La maternidad también me ha potenciado muchas características que ya tenía y después pude trasladarlas al trabajo. Sentía que la oficina es un campo de juego, que los colores, las plastilinas, los legos, podían ser juguetes, es la facilidad que tenemos las mamá para convertir cualquier cosa en un juguete para tu hijo. Lo mismo se busca en el ámbito académico, en la clase despertar la curiosidad y la facilidad de tener algo lúdico para los estudiantes.

9. Dentro de todo este gran viaje, ¿Hay alguna persona o personaje que te haya inspirado?

Hay dos personas que son importantes en mi vida, mis mentoras. Ellas no lo saben pero desde hoy se enterarán. La primera, es una persona con quien la vida me dio la oportunidad de trabajar en varias oportunidades, cerca de ella pero no necesariamente juntas, ella es Liliana Galván. La primera vez que trabajé como profesora tenía 17 años y estaba aún en la universidad, allí la pude conocer, los proyectos que realizaba me encantaron y nos conectamos rápido. Tiempo después nos hemos seguido viendo en congresos de educadores que ella daba y yo participaba. Después la vida nos ha conectado por internet, años después cuando estaba en Francia haciendo un doctorado, nos contactamos y me pregunta: ¿Lea estás haciendo algo de tecnología? estamos viendo un proyecto en la UPC, es allí cuando me conecta con la universidad, nos encontramos y trabajamos juntas por mucho tiempo.

La segunda persona que también me inspiró y que conocí en la UPC fue Mariana Rodríguez, quien un tiempo fue CEO de la UPC. Fue ella quien me alentó a que siga mis sueños, cuando tuve situaciones difíciles estuvo allí todo el tiempo apoyándome. Tiempo después también seguimos encontrándonos en otros ámbitos y siempre es una persona que yo admiro porque tiene una visión y capacidad de llegar a las personas con mucha sabiduría y claridad.

10. ¿Alguna frase propia o ajena que interiorizaste?

Una familiar, “paciencia y buen humor”.

11. Para terminar, una frase que identifique a las Mamás Ejecutivas.

“Las Mamás Ejecutivas son capaces de hacer sus sueños.

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